En la vibrante y apasionada escena futbolística del País Vasco y Navarra, las gradas cobran vida con la presencia de ultras que no solo animan a sus equipos, sino que también llevan consigo ideologías políticas y una historia rica en rivalidades. Desde Athletic Bilbao hasta Osasuna, exploraremos los elementos distintivos de estos grupos y cómo han dejado su marca en el fútbol español.
Athletic Bilbao: Herri Norte Taldea y Más Allá
Athletic Bilbao, conocido por su equipo de fútbol de alto rendimiento, alberga a Herri Norte Taldea (HNT), un grupo histórico fundado en 1981. A pesar de enfrentar represión policial, los 80-100 hooligans activos mantienen su presencia. La violencia pasada y la actividad política los han marcado, con conexiones pasadas con ETA. Iñigo Cabacas Herri Harmaila, formado en 2013, lidera las gradas en un esfuerzo por unificar a los seguidores.
Los enemigos incluyen a Ultras Sur y Frente Atlético, y su famosa pelea callejera contra Spartak Moscow en 2018 los catapultó a la atención internacional.
Real Sociedad: RSF Firm y Bultzada Txuriurdina
En San Sebastián, la Real Sociedad ha vivido la presencia de RSF Firm, un grupo hooligan histórico. Aunque Peña Mujika ha perdido relevancia, RSF Firm sigue siendo una fuerza formidable. El proyecto “Grada Aitor Zabaleta” busca la cooperación entre el club y los aficionados para crear una atmósfera positiva. Además, una nueva generación de hooligans, los Hooligans from Donosti, desafía las expectativas.
Alavés: Iraultza 1921 y Sports Friends
Con Iraultza 1921 como su grupo actual, Alavés destaca por su postura ultra frente al fútbol moderno. Además, los Sports Friends, aunque inactivos, dejaron su huella. Sus acciones contra Frente Onuba en 2014 fueron notorias.
Osasuna: Indar Gorri y Más Allá de las Fronteras
Indar Gorri, desde 1987, ha enfrentado desafíos policiales pero sigue siendo activo. Sus conexiones con Real Sociedad y Alavés, y la amistad con Curva Mare Cesena en Italia, destacan su alcance internacional. Su historia incluye buenos viajes y enemistades con Ligallo Fondo Norte y Ultras Sur.
Estos ultras del País Vasco y Navarra, arraigados en la historia, la política y la pasión futbolística, tejen una narrativa única en las gradas de los estadios. Sus rivalidades, amistades y acciones marcan la pauta en la rica y compleja red del fútbol español. Desde las peleas en las calles hasta las conexiones internacionales, estas comunidades ultrapasionadas siguen dejando una marca imborrable en la historia del fútbol regional y nacional.
